Lara Ferreiro, psicóloga experta en autoestima, relaciones y bienestar emocional.

El verano, con su sol radiante, sus playas de ensueño y las ansiadas vacaciones, debería ser una época de desconexión, disfrute y bienestar. Sin embargo, para muchas personas, también se convierte en una etapa de comparaciones, frustraciones y autocrítica constante.

¿Te ha pasado que vas a la playa y empiezas a fijarte en el cuerpo de los demás más que en disfrutar del agua? ¿O que abres Instagram y piensas que tus vacaciones no son lo suficientemente exóticas, divertidas o “instagrameables”? Tranquila, no estás sola. Y precisamente por eso el verano es uno de los mejores momentos para trabajar el amor propio y fortalecer tu autoestima.

¿Por qué en verano se tambalea nuestra autoestima?

Durante el verano, se activan múltiples factores que pueden afectar a nuestra salud emocional y percepción personal:

  1. Mayor exposición del cuerpo: Bañadores, bikinis, pantalones cortos… Todo eso deja al descubierto partes del cuerpo que solemos ocultar en invierno. La mirada (propia y ajena) puede convertirse en un juicio constante.

  2. Comparaciones en redes sociales: Las redes están llenas de fotos de cuerpos aparentemente “perfectos”, viajes de ensueño y parejas felices en playas paradisíacas. Esto puede hacer que nos sintamos insuficientes o que nuestras vacaciones parezcan menos interesantes.

  3. Presión por disfrutar al máximo: Sentimos que tenemos que aprovechar cada minuto, salir, viajar, ligar, reír… y si no lo hacemos, pensamos que algo va mal con nosotros.

  4. Cambio de rutinas: El descontrol de horarios, la alimentación más desordenada o el exceso de tiempo libre pueden afectar al estado de ánimo y fomentar pensamientos negativos.

  5. Soledad veraniega: Para quienes no tienen pareja o amigos disponibles en verano, esta época puede resaltar aún más la sensación de estar solos.

¿Qué es el amor propio y por qué cultivarlo más en verano?

El amor propio no es un concepto abstracto o un eslogan bonito. Es la base de una vida emocionalmente sana. Significa tratarte con respeto, escucharte, cuidarte y aceptarte tal y como eres, sin condiciones.

Cuando tienes una autoestima sólida:

  • No necesitas compararte con nadie.
  • Puedes ver tu cuerpo como un aliado, no como un enemigo.
  • Disfrutas de tus vacaciones, aunque no salgas de tu ciudad.
  • Te das permiso para descansar, desconectar y no ser productivo 24/7.

Cómo fortalecer tu autoestima y amor propio este verano 2025

Aquí van 8 claves prácticas para cuidarte emocionalmente este verano y quererte un poquito (¡o mucho!) más:

1. Haz limpieza de redes sociales

Deja de seguir cuentas que te hacen sentir mal contigo. Llena tu feed de diversidad corporal, inspiración real y mensajes positivos. Recuerda: lo que ves influye en cómo te sientes.

2. Normaliza tu cuerpo

Todos los cuerpos son válidos. Celulitis, estrías, tripita, piel pálida… Todo eso es normal. No necesitas cambiar tu cuerpo, sino la mirada con la que lo observas.

3. Cambia el foco

En vez de centrarte en cómo luces, céntrate en cómo te sientes. ¿Estás disfrutando del mar? ¿Te hace feliz ese helado? ¿Te sientes libre bailando bajo las estrellas? ¡Eso es lo que importa!

4. Evita la trampa de la comparación

Cada uno vive el verano a su ritmo y a su manera. Las redes muestran solo una parte (editada y filtrada). Compárate contigo, no con los demás.

5. Cuida tu diálogo interno

Háblate con cariño. Elimina frases como “estoy fatal”, “no debería comer esto”, “qué cuerpo tengo…” y sustitúyelas por otras más amables: “hoy me merezco disfrutar”, “mi cuerpo me permite vivir este momento”, “lo estoy haciendo lo mejor que puedo”.

6. Rodéate de personas vitamina

Pasa tiempo con gente que te quiere por lo que eres, no por cómo luces. Personas con las que puedas reírte, compartir silencios y sentirte tú mismo/a sin filtros.

7. Vive el presente

Aprovecha el aquí y el ahora. No pienses en si subirás 3 kilos, si te quedaste sin vacaciones “épicas” o si no tienes pareja. El momento presente es un regalo. Disfrútalo.

8. Practica el autocuidado emocional

Medita, escribe un diario, haz yoga, ríe, baila, toma siestas… Haz lo que te recargue emocionalmente. Cuida tu bienestar como cuidarías el de un ser querido.

¿Y si me sigo sintiendo mal? Cómo gestionar tus emociones en verano

Si a pesar de estos consejos sientes ansiedad, tristeza o baja autoestima, es importante no ignorarlo. Aquí van algunas estrategias para gestionarlo mejor:

  • Valida lo que sientes: No tienes que estar feliz todo el tiempo. Sentirte vulnerable también es parte del verano.

  • Evita exigirte ser “la mejor versión” constantemente. A veces, la mejor versión es simplemente descansar.

  • Pon límites: A veces hay que decir no a ciertos planes, personas o situaciones que no nos hacen bien.

  • Habla de cómo te sientes: Compartir tus emociones con amigos o con un profesional de la salud mental puede ayudarte a aliviar la carga.

  • Pide ayuda psicológica si lo necesitas. La terapia no es solo para “momentos de crisis”, también es una herramienta para crecer, sanar y quererte más.

Resumiendo…

Este verano, no necesitas más filtros ni más likes. Necesitas más amor propio, más conexión contigo, más libertad para disfrutar sin compararte. Tu valor no está en tu talla, ni en tu destino vacacional, ni en lo que otros publican. Está en ti, en tu autenticidad, en tu capacidad de sentir, vivir y amar.

Y si necesitas ayuda para reconectar contigo, estoy aquí para acompañarte en ese proceso. Puedes agendar una sesión de terapia en nuestra Clínica de Psicología Lara Ferreiro, tanto presencial como online. 

Porque quererte más no es egoísmo. Es salud mental.

¿Y tú, cómo vas a empezar a cuidarte este verano?